QUE SON:
Los peirones, también denominados pilones, están situados en la salida de una gran parte de los pueblos de Aragón -principalmente en las provincias de Teruel y Zaragoza- y señalan un inicio o confluencia de caminos.
Queda un buen número de ellos (más de 2000 ejemplares), pero se han perdido muchos otros.
Son figuras arquitectónicas (pilares o monolitos), de pequeñas dimensiones (generalmente de 2 o tres metros de altura y medio de lado o diámetro), construidos en piedra, ladrillo o materiales mixtos, tienen una estructura de tres partes que se repite en todos y cada uno de ellos: La base, más ancha, puede ser de uno o varios escalones de piedra desiguales. A continuación una columna o cuerpo, normalmente cuadrada (aunque también pueden verse circulares u octogonales) que o bien está construida con piedras sujetas con argamasa o con ladrillos revocados con yeso y mayormente revocada por fuera con cal o yeso, pudiendo estar decorada con formas geométricas en relieve. Al final del cuerpo suelen tener un saliente de ladrillo, sobre el que se apoya la cabecera normalmente abierta por una o varias capillas u hornacinas donde se aloja la imagen de un santo o virgen bajo cuya advocación se ha erigido o se encomiende el lugar o camino. Esta hornacina solía estar protegida por un cristal y una malla metálica (hay restos de ello en algunos) La cubierta suele ser un tejadillo o chapitel a dos o cuatro vertientes, planos o con teja y encumbrados con una cruz de hierro de diferentes tamaños.
ORIGEN:
Eran monolitos construídos en lugares muy determinados, y generalmente donde antes se erigían otros más rústicos de "palo", con unas piedras amontonadas al pie, que marcaban los caminos y las encrucijadas y las gentes veneraban como altares a los dioses del
lugar. Fue antigua costumbre en el reino de Aragón elevar cruces en conmemoración de fechas o acontecimientos, o como simples testimonios de piedad cristiana; generalmente junto a los caminos para fomentar la piedad de los viajantes, y a veces frente a monasterios y ermitas. Era una manera mas de implantar el cristianismo en época de la Reconquista, junto con la construcción de ermitas, templos, etc. En principio fueron sencillos monumentos y acabaron por ser verdaderas obras de arte gótico y renacentista.
El origen de los peirones es posible que se remonte a la costumbre (de la cual quedan muestras en el Pirineo) de levantar pequeños montículos con la acumulación de lajas y piedras planas o bien monolitos que puestos en vertical destaquen sobre el horizonte y sirvan a caminantes y pastores como faro. Un faro que era necesario si tenemos en cuenta la difícil orografía y las inclemencias atmosféricas (muchas veces las nevadas ocultaban los antiguos caminos), a la vez que aseguraba frente a los malos espíritus protección de los dioses y posteriormente de los santos y vírgenes.
TERMINOLOGÍA:
Parece ser que la palabra aragonesa peirón no ha pasado al castellano, por cuanto no aparece documentada en ninguno de los diccionarios de la Lengua Española, siendo humilladero o cruz de término el nombre que le corresponde en su acepción castellana. En Cataluña suele llamarse pedró, en Valencia peiró. Dentro del mismo Aragón se usan diferentes términos para designarlo, así lo podemos encontrar como Peirón, capilla, pilaret, pilón y pilar, de todas estas formas y alguna más podemos oírlo nombrar dentro del territorio enmarcado por los límites de la histórica Corona de Aragón, zona en la cual están más extendidas sus funciones de orientación, protección y votiva o de recuerdo.
Rafael Andolz usa los dos términos pairón
y peirón, de la siguiente forma:
- Pairón: " Pilón con la imagen de algún santo o con la cruz en el límite del
pueblo, ante el cual solía hacer novena y hoguera.
- Peirón: " 1.- Pilar de piedra colocado a la orilla del camino con alguna
imagen sagrada. 2 - Humilladero".
Vemos, pues, que etimológicamente peirón deriva de "peiro", "Pedro" y
"piedra". En cuanto al término pairón, creemos que es una deformación de la voz peirón, que por su uso cotidiano ha llegado a normalizarse.
LOS PEIRONES DE PLOU
Todavía se conservan tres peirones en pie:
|